El estudio de diseño neoyorquino Impossible Productions acaba de presentar un proyecto que haría las delicias de los armadores más excéntricos: un superyate con cinco piscinas.
Aunque sus líneas exteriores ya hacen del 78 Metre SuperYacht un barco único, si bien no se aleja demasiado de los diseños actuales que ofrece el mercado al mantener un ambiente clásico, posee dos elementos que desafían los límites conceptuales de la arquitectura naval. Además del repóquer de piscinas, ya de por sí un reto logístico, la embarcación presume de ser la única en tener un amplio hangar para helicópteros, que queda oculto bajo la cubierta de proa. Por supuesto, cuenta también con un garaje para almacenar una lancha y otros juguetes acuáticos. Más allá de la extravagancia de elegir cubierta para zambullirse en agua dulce en un barco privado, las piscinas crean un curioso efecto a bordo, ya que las tres que están instaladas en las cubiertas superiores tienen un fondo de vidrio lenticular, lo que permite el paso de la luz y la sensación de estar en un espacio mucho más abierto, sin apenas escollos arquitectónicos que limitan la visibilidad. Por su parte, la piscina de la cubierta principal, la de mayores dimensiones, se fusiona a la perfección con un jacuzzi que finaliza en la misma línea de popa. El 78 Metre SuperYacht de Impossible Productions se presenta con una gran suite del propietario con terraza privada, así como con tres cabinas VIP y dos para invitados, una zona que también cuenta con terraza y salón. Los invitados son atendidos por 19 tripulantes y disfrutan de sala de cine, gimansio, sauna, beach club y varias zonas sociales. No obstante, el armador puede elegir entre diferentes opciones para hacerse con un superyate único.
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