Tras el ascenso al poder del Emperador Palpatine, la verdadera naturaleza de su ejecutor más siniestro sigue siendo un misterio. Darth Vader es una figura dominante pero esquiva: la sombra proyectada por un régimen imperial maligno, desconocida incluso para sus altos funcionarios. Pero incluso cuando su humanidad se desvanece en el mito, Vader sigue atormentado por las promesas del lado oscuro, buscando el poder supremo que su maestro insinuó pero le ocultó: el poder de vencer a la muerte misma. En el planeta volcánico de Mustafar, Vader lleva a cabo un oscuro ritual, extrayendo la sangre de un cristal kyber para forjar su sable de luz. Este acto desata un poder mucho mayor del que anticipaba, permitiéndole vislumbrar el potencial ilimitado de la Fuerza. Vader está decidido a seguir esta visión, incluso si eso significa desafiar las órdenes de su maestro. Sin embargo, encuentra al Emperador sospechosamente favorable a su misión, llegando incluso a enviarlo al sistema Diso para investigar rumores sobre un chamán que utiliza la Fuerza y es capaz de resucitar a los muertos. A su lado se encuentra un grupo de la Guardia Real del Emperador, ataviados con túnicas escarlatas y liderados por el coronel Halland Goth, un soldado condecorado con un interés muy personal en la misión de Vader. Mientras las verdaderas motivaciones del Emperador se revelan, Vader se hunde cada vez más en la obsesión. Su viaje lo lleva a recorrer la galaxia, siguiendo rumores y fantasmas. Pero por muy lejos que viaje, no puede escapar de las sombras que habitan en su propia alma. Atormentado por los ecos de su pasado, Vader busca la verdadera solución a su búsqueda: solo cuando haya erradicado toda debilidad podrá convertirse en un maestro del mal.
